miércoles, 23 de octubre de 2013

La cuestión del elefante



"En un lejano país de Asia, había una ciudad en la que todos sus habitantes eran ciegos. Cierto día, llegó un rey con su cortejo, trajo su ejército y acampó en el desierto. La población estaba ansiosa por conocer el elefante y se precipitaron a su encuentro. Y claro, como no podían verlo, tantearon para reunir información, palpando distintas partes de su cuerpo. El primero se encontró con la trompa del elefante. El segundo con un colmillo. El tercero con una oreja. El cuarto una pata. El quinto el estómago y el sexto el rabo. Después todos se fueron a casa contentos de haber descubierto exactamente cómo era un elefante.

Comenzaron a contarse sus experiencias."¡Oh, un elefante es fantástico!" dijo el primero, "blando y ágil como una serpiente". "No", dijo el que había tocado el colmillo "es bajo y duro". "Vosotros dos estáis equivocados" dijo el tercero que había estado tocando la oreja" el elefante es plano y delgado como una gran hoja". "Oh, no", dijo el cuarto que estuvo tocando la pata."Es como un árbol". Y los otros dos añadieron: "Es como un gran odre", "es como una soga". Estuvieron discutiendo y discutiendo.

En ese momento pasó por allí una persona que podía ver. "Todos vosotros tenéis razón", dijo esa persona. "Todas las partes juntas son el elefante"
Cada uno había palpado una sola parte, y todos la habían percibido erróneamente. Ninguno conocía la totalidad, por lo que todos imaginaban algo, pero algo equivocado.

Adaptación de un cuento sufí

CUESTIONES: ¿Qué aplicaciones tiene esto al mundo de los negocios? ¿Y en concreto a la negociación internacional?